Te llevo conmigo vaya donde vaya

Las lágrimas caen de mi cara empapándome completamente,

mis ojos irritados y cansados.

Mi cabeza retumbando de dolor,

mi cerebro explotando con cada sonido.

Siento una presión en el pecho que no me deja respirar.

Trato de pensar en lo bueno,

pero solo lo malo da cara en el momento.

Sería tan fácil agarrar una navaja y cortarme las venas,

sería tan fácil saltar de un décimo tercer piso,

sería tan fácil ahogarme en pastillas y no despertar.

La vida sabe cuanto lo quiero.

Quiero tener el valor de ser completamente egoísta,

quiero no pensar más.

Siempre hundida en mis penas,

hundida en mi odio,

hundida en mi desesperación.

Solo quiero la compasión,

quiero la comprensión,

y quiero la aceptación;

La vida no fue hecha para mí

o tal vez yo no fui hecha para ella.

Y solo quiero gritar…

Quiero llorar…

Quiero morir.

No soy normal, no me siento normal.

Realmente trato de mejorar, pero hay algo…

Algo más fuerte que yo que me lo impide.

Una carga en el corazón, una sombra que ni la oscuridad de la noche la desvanece.

Y estoy cansada de llevar ese algo conmigo vaya donde vaya,

estoy cansada, solo estoy tan cansada de vivir.

¿Es tan difícil de comprender?

Solo quiero gritar…

Quiero llorar…

Porque mi cerebro grita: ¡Quiero morir!

y el mundo grita más fuerte: ¡Que patética!